Dicen algunos expertos que las altas temperaturas que sufre medio planeta este verano tal vez sean prueba de que el cambio climático achacable al hombre se esté acelerando. Normalmente no me hace mucha gracia la lluvia, al menos la lluvia en la ciudad en otoño o invierno me suele resultar molesta. Pero una buena tormenta que arrastrara las altas concentraciones de ozono en la atmósfera y refrescara el ambiente, es lo que más anhelo últimamente. Y en eso estaba hace un rato, cuando he empezado a recordar algunas películas en las que la lluvia es la protagonista de algunas de mis escenas favoritas.
No citaré Blade Runner y el famoso monólogo de Roy, porque es obvio (aunque acabo de hacerlo, juas..)
El año que vivimos peligrosamente, dirigida en 1982 por Peter Weir y protagonizada por Mel Gibson, Sigourney Weaver y Linda Hunt (actriz que ganó el Oscar por interpretar un personaje masculino), es una de mis películas favoritas. De esas que metería en mi lista personal de preferidas, aunque sin saber en qué lugar exacto. Ese es mi problema con las listas, puedo hacer una selección de lo que sea, películas, libros, canciones.. pero soy incapaz de darles un número. La lluvia aparece varias veces ya que la acción transcurre en Indonesia (durante las revueltas contra el régimen Sukarno, en 1965). La escena a la que me refiero muestra a una abatida Sigourney Weaver andando por las calles de Yakarta bajo la lluvia, tras conocer una información secreta que apunta un inminente comienzo de la guerra civil. De fondo suena la música de Vangelis. Se dirige a buscar a Guy Hamilton (Mel Gibson) con el que acaba de iniciar un romance. Los dos se encuentran, se besan y abrazan en un contraluz.
Manhattan, y la escena en la que Woody Allen y Diane Keaton corren bajo la lluvia y se resguardan en el planetario de Central Park.
Y hay muchas más, tal vez siga otro día...
|